Una historia que trasciende los tiempos precolombinos
Pensar en el río Magdalena es mucho más que hablar de agua dulce, brisa y calor, porque en sus entrañas lleva la historia de nuestros ancestros, de los indígenas que se bañaron en él por primera vez.
Gracias al Río Magdalena, Colombia y todo su pueblo disfrutó de trueques, importaciones, exportaciones, pesca, transporte, y hoy todavía estas y más actividades económicas siguen sustentando a toda una civilización.
Pensar en el río Magdalena es recordar una historia de fuerza, honor y fertilidad, gracias a todos los pueblos que se asentaron a su alrededor y subsistieron por todos los productos naturales que emanaban de las tierras aledañas.
Por esto, el río Magdalena, es más que un río; es vida, es libertad, es Colombia.
100% colombiano
Aguardiente del Río es hecho por manos 100% colombianas en la mítica ciudad de Cartagena de Indias, un destino turístico de Colombia que fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
En Cartagena podrás conocer islas, historia, estilos arquitectónicos y neoclásicos en sus calles, diferentes atractivos naturales, culturas ancestrales, tipos de bailes y personas llenas de alegría.
Disfruta del delicioso sabor del Aguardiente del Río en bares, restaurantes, hoteles, centros comerciales y cualquier otro lugar turístico de la ciudad.
¡VEN A CARTAGENA Y PASA MOMENTOS INOLVIDABLES CON AGUARDIENTE DEL RÍO!
Separamos, vaporizamos y condensamos tres veces los sabores más exclusivos de la Costa colombiana para que tu paladar se deleite mientras disfrutas de los mejores momentos.
Cuando hablamos de aguardientes premium, contamos con el mejor precio del mercado, para que disfrutes cada momento sin ningún tipo de remordimiento.
Destaparlo, servirlo, oler su aroma y probar su sabor frutal es de las mejores experiencias que podrás tener.
Somos el primer Aguardiente Boutique de Colombia, nos caracterizamos por nuestro sabor y nuestro estilo luxury para cualquier ocasión.
Reposar y envejecer el aguardiente en barriles nunca antes había tenido tanto sabor en tu boca.